Estamos haciendo el fácil y saludable Daigakuimo, batata confitada, usando el método Mushiyaki, una combinación de cocción al vapor y fritura. ¡Disfruta la deliciosa corteza crocante, y el interior suave y esponjoso!
Cortemos la batata. Lava la batata de antemano y quítale las dos puntas. Si es muy gruesa, córtala a la mitad verticalmente.
Corta la batata en cuñas mientras la rotas hacia ti.
Deja la batata en una generosa cantidad de agua por unos 10 minutos para evitar que se decolore.
Hagamos Daigakuimo. Coloca aceite vegetal y azúcar en una sartén.
Drena ligeramente las cuñas de batata.
Colócalas en la sartén y distribúyelas. No debes secar la humedad de la batata para lograr una textura suave y esponjosa en el interior.
Tapa y enciende el fuego.
Cocina a fuego medio. Este proceso de cocción se llama Mushiyaki, en el que los ingredientes se cuecen al vapor y fríen en una sartén.
Cuando empiecen a sonar crujidos, agita la sartén.
Pasados 2 minutos, destapa y dale vuelta a las cuñas de batata con unos palillos para cocinar.
Tapa de nuevo y cocina por 2 minutos más.
Destapa y dale vuelta a batata para dorar uniformemente.
Reduce el calor si la sartén se calienta mucho.
Repite el proceso hasta que la superficie esté deliciosamente dorada.
Perfora una batata con un palillo de bambú.
Cuando esté suficientemente suave para que el palillo la perfore, vierte unas gotas de salsa de soya.
Si te gusta un exterior extra crocante, saltea por más tiempo en esta etapa, y luego añade la salsa de soya.
Rápidamente agita la sartén y está lista para servir.
Acomoda el Daigakuimo en un plato y espolvorea con semillas de ajonjolí negro tostadas.
Notas de la receta
Sólo unas gotas de salsa de soya son suficiente para extraer la dulzura de la batata, de modo que evita usarla en exceso.
Esta receta de daigakuimo usa una mínima cantidad de aceite.
Este es un postre delicioso, saludable y fácil, de modo de definitivamente deberias probarlo.